jueves, 8 de julio de 2010

EL MAL

El mal
El problema del mal ha sido una preocupación central de los filósofos y de todas las grandes religiones. Algunas de las soluciones propuestas se han basado en negar o bien la existencia del mal o bien la de un Dios todopoderoso. En las enseñanzas hindúes, por ejemplo, el mal no tiene presencia real, y forma parte del mundo ilusorio de los fenómenos. En la antigua religión persa del zoroastrismo y la secta de Oriente Próximo conocida como maniqueísmo, el mal se atribuye a la existencia de una deidad perversa, contra la que tiene que luchar la deidad buena. En el Libro de Job, por otra parte, los que consolaron a Job ofrecieron explicaciones poco claras del inmerecido sufrimiento de éste, la demanda de una explicación es presentada como presuntuosa y el escritor bíblico sugiere que los caminos de Dios son insondables y están más allá del entendimiento humano.

SAN AGUSTÍN
Conforme la teología cristiana empezó a emerger en los siglos III y IV, el problema del mal se agravó porque el cristianismo estaba comprometido con la idea de la existencia de un Dios todopoderoso y benevolente, pero conocía al mismo tiempo la existencia cierta del mal. A finales del siglo IV san Agustín formuló una solución que ha tenido la mayor influencia en los pensadores cristianos posteriores. De joven, san Agustín había aceptado la teología dualista del maniqueísmo. La influencia del neoplatonismo le preparó para su conversión al cristianismo y su reconciliación teológica de la creencia cristiana en un Dios benevolente, creador de todo lo que existe, con la creciente presencia del mal en el mundo. Según san Agustín, el mal no fue creado por Dios, cuya obra es buena en un sentido absoluto. El mal es la privación o ausencia de lo bueno, de la misma forma que la oscuridad es la ausencia de la luz. Es posible, sin embargo, que algo creado bueno pierda parte de su bondad, que se vuelva corrupto, pues el mal se impone en silencio cuando las criaturas dotadas del libre albedrío —los ángeles, esos espíritus menores como los demonios, y los seres humanos— se alejan de las cosas buenas más elevadas o más completas, y eligen las menores o parciales. Además, según san Agustín lo que al principio parece ser malo puede resultar bueno en el contexto de la eternidad. Desde la perspectiva eterna de Dios, todo es bueno.
RAZONAMIENTOS POSTERIORES
Las ideas de san Agustín influyeron mucho a los teólogos católicos posteriores, como santo Tomás de Aquino y los teólogos protestantes de la Reforma, en especial a Juan Calvino. En el siglo XVII, el filósofo alemán Gottfried Wilhelm Leibniz afirmó que el poder de la creación de Dios se limitaba a mundos lógicamente posibles, y que el mal es una parte necesaria del “mejor de todos los mundos posibles”.

EL SIGLO XX
Las guerras a una escala sin precedentes en la historia y las persecuciones desencadenadas en el siglo XX socavaron la creencia secular en el progreso inevitable y confrontaron de nuevo a filósofos y teólogos con el problema del mal. En concreto, la cuestión de si el sufrimiento extremo puede ser justificado desde presupuestos teológicos se planteó con respecto al Holocausto. Algunos han especulado sobre la ausencia de Dios; otros han vuelto a retomar la idea del Libro de Job sobre el misterio de los caminos de Dios. El problema del mal ha vuelto así a ser una preocupación mayor en la teología contemporánea.
OBSERVACIONES
 En algún momento la humanidad recibió normas para que pueda ser buena, justa y grata a los ojos de Dios.
 Estas reglas o normas de conducta pudieron ser dictadas a los hombres por Maestros de la humanidad, las recibieron los hombres directamente de YAHVÈ, o bien pensadores, hombres preclaros se las inventaron, para poder los gobiernos (reinos) poner en orden la sociedad que dirigían.
 Alianza (Biblia), teología del Antiguo Testamento, pacto entre Dios y sus fieles. El Éxodo 24, 7 relata que, Moisés tomó 'el código de la alianza y lo leyó en presencia del pueblo, el cual dijo: 'Obedeceremos y cumpliremos todo lo que ha dicho el Señor''.

El código de la alianza – Fragmento del Éxodo. Biblia de Jerusalén.
La justicia. Deberes con los enemigos.

23 1No levantes testimonio falso, ni ayudes al malvado dando testimonio injusto.
2No sigas a la mayoría para hacer el mal; ni te inclines en un proceso por la mayoría en contra de la justicia.
3Tampoco favorecerás al pobre en su pleito.
4Si encuentras el buey de tu enemigo o su asno extraviado, se lo llevarás.
5Si ves caído bajo la carga el asno del que te aborrece, no rehúses tu ayuda. Acude a ayudarle.
6No tuerzas el derecho de tu pobre en su pleito.
7Aléjate de causas mentirosas, no quites la vida al inocente y justo; y no absuelvas al malvado.
8No recibas regalos; porque el regalo ciega a los perspicaces y pervierte las causas justas.
9No oprimas al forastero; ya sabéis lo que es ser forastero, porque forasteros fuisteis vosotros en la tierra de Egipto.

Leyes morales y religiosas.
17A la hechicera no la dejarás con vida.
18Todo el que peque con bestia, morirá.
19El que ofrece sacrificios a otros dioses, será entregado al anatema.
20No maltratarás al forastero, ni le oprimirás, pues forasteros fuisteis vosotros en el país de Egipto.
21No vejarás a viuda ni a huérfano.
22Si le vejas y clama a mí, no dejaré de oír su clamor,
23se encenderá mi ira y os mataré a espada; vuestras mujeres quedarán viudas y vuestros hijos huérfanos.
24Si prestas dinero a uno de mi pueblo, al pobre que habita contigo, no serás con él un usurero; no le exigiréis interés.
25Si tomas en prenda el manto de tu prójimo, se lo devolverás al ponerse el sol,
26porque con él se abriga; es el vestido de su cuerpo. ¿Sobre qué va a dormir, si no? Clamará a mí, y yo le oiré, porque soy compasivo.
27No blasfemarás contra Dios, ni maldecirás al principal de tu pueblo.

 La muerte al infractor con faltas graves era común, la supresión del individuo infractor era la solución al problema de corrupción.
 Sin embargo también han existido quienes entregan al pueblo recomendaciones para facilitar un CRECIMIENTO INTERIOR, mismo que, impele a los hombres a elevar las consciencias y a un cambio de conducta para evitar venganzas y anatemas divinos provocados por causa del mal encarnado en la tierra.


Pablo se dirige a los habitantes de Corinto en una de sus epístolas.
Fragmento de la Primera Epístola a los Corintios. Pasaje del Nuevo Testamento.
13, 1-13.
1Aunque hablara las lenguas de los hombres y de los ángeles, si no tengo caridad soy como bronce que suena o címbalo que retiñe.

2Aunque tuviera el don de profecía, y conociera todos los misterios y toda la ciencia; aunque tuviera plenitud de fe como para trasladar montañas, si no tengo caridad, nada soy.

3Aunque repartiera todos mis bienes, y entregara mi cuerpo a las llamas, si no tengo caridad, nada me aprovecha.

4La caridad es paciente, es servicial; la caridad no es envidiosa, no es jactanciosa, no se engríe; 5es decorosa; no busca su interés; no se irrita; no toma en cuenta el mal; 6no se alegra de la injusticia; se alegra de la verdad. 7Todo lo excusa. Todo lo cree. Todo lo espera. Todo lo soporta.

8La caridad no acaba nunca. Desaparecerán las profecías. Cesarán las lenguas. Desaparecerá la ciencia.

9Porque parcial es nuestra ciencia y parcial nuestra profecía.

10Cuando venga lo perfecto, desaparecerá lo parcial.

11Cuando yo era niño, pensaba como niño, razonaba como niño. Al hacerme hombre, dejé todas las cosas de niño.

12Ahora vemos en un espejo, en enigma. Entonces veremos cara a cara. Ahora conozco de un modo parcial, pero entonces conoceré como soy conocido.

13Ahora subsisten la fe, la esperanza y la caridad, estas tres. Pero la mayor de todas ellas es la caridad.
 El hombre re-inventando al hombre, ubicando su esencia, su origen, su destino, su misión y la fórmula para situarse en el pico de la creación. La soberbia, la ignorancia, los apegos; eso nos mantiene esclavos del dolor y ligados al mal. Sin el hombre encarnado en la tierra el mal no existiría, el mal es un producto de la mente del hombre.
 El superhombre que predecía Zaratustra no es la consumación del modelo humano; Nietzsche veía al último hombre un poco al estilo de Cournot, como el hombre que lo ha organizado todo para eludir riesgos y que se encuentra definitivamente satisfecho con su vulgar felicidad; pero «el hombre es algo que debe ser superado, es un puente, no un fin»; la característica del superhombre es el amor al riesgo y a los peligros; la voluntad de poder es el auténtico nombre de la voluntad de vivir; porque la vida sólo aumenta cuando somete el medio que la rodea. -Y actualmente estamos sufriendo los efectos de esta actitud que ha comprometido la calidad de vida de las actuales y futuras generaciones - ¿Podría esto juzgarse como un acto de maldad?

 El hombre es algo que debe ser superado, es un puente, no un fin.
No resistáis al mal

Si, pues, tu ojo derecho te escandaliza, sácatelo, y arrójalo de tí, porque mejor te es que perezca uno de tus miembros, que no que todo tu cuerpo sea arrojado a la gehenna.
Y si tu mano derecha te escandaliza, córtatela y arrójala de ti, porque mejor te es que, uno de tus miembros perezca, que no que todo el cuerpo sea arrojado a la gehenna.
(MATEO, V 27-31)

La integridad del alma es la única cosa que importa. No hay otro problema que resolver ni otra necesidad que satisfacer sino ésa, porque teniéndola, se tiene todo.

Debo hacer una consideración que sonara algo forzada; el mal es algo necesario para el desarrollo, elevación y cumplimento del destino de la humanidad. Los que actúan “mal” haciendo sufrir a congéneres y demás seres de la naturaleza actúan bajo un orden Karmico que hay que superar.
No todos los sufrimientos se ganaron; no todos los sufrimientos descienden sobre nosotros como castigo o retribución, pero todos nos vienen de la infinita sabiduría del Yo Superior para ayudarnos; ya sea individual o colectivamente a desenvolver un mejor carácter, nuevas cualidades o a nutrir nuestra inteligencia. Solo con el paso del tiempo podemos ver el bien que nos hizo el sufrimiento.
La humanidad progresa en una corriente formada por sus propias lágrimas purgando deficiencias y errores. El cielo es un estado de la mente, lo mismo que el infierno. La causa de la felicidad o de la desdicha no es sino uno mismo, es una idea en la mente.
El responsable último de nuestro estado de infelicidad actual no es el gobierno, ni nuestro (a) cónyuge, ni nuestros hijos, padres, hermanos o novias o novios. No es nuestro patrón ni nuestros empleados. No es la coyuntura económica o política, ni la sequía ni las lluvias torrenciales. No es Dios, no Alá, ni Buda. Es nuestra propia mente, he aquí donde debemos buscar.
Es hora de que reconozcamos que nuestra felicidad no depende bienes que seamos capaces de producir y de consumir, ni de nuestro nivel socioeconómico de vida, ni del reconocimiento social que logremos.
Adquiriendo cierto nivel de consciencia comprendemos que, debemos actuar conscientemente en favor de la obra de Dios en la tierra y que, obrando bien y de acuerdo a los PRINCIPIOS FUNDAMENTALES (Kybalion) acortaremos nuestra constante y repetitiva estancia en este valle de lágrimas. (Materias de estudio, el Karma y la Reencarnación).
Por último:
CAMBIA LA EXCITACIÓN POR EL FLUIR

No hagas, y sin embargo nada queda sin hacer.
Lao Tse.

El ser humano es una criatura reactiva, se mueve a través de una dinámica de acción y reacción, y desde esta perspectiva genera la mayoría de sus actos. En realidad reaccionamos no accionamos, por eso necesitamos el estimulo de la excitación que provoque respuestas en nosotros. A diario reaccionamos con cólera ante una ofensa, con miedo ante una amenaza, con alegría ante una buena noticia o con tristeza ante un desengaño. No obstante, este proceso reactivo apenas queda registrado en la conciencia por lo que seguimos experiencias nuevas que nos hagan reaccionar y nos saquen del monótono aburrimiento de la rutina. El problema es evidente; La caída en una dependencia, cuando no en la esclavitud. Si nuestra tristeza depende de los que nos ensombrecen la vida, si nuestra alegría depende de que nuestro entorno se comporte como creemos adecuado, si necesitamos experiencias fuertes para sentirnos vivos, habremos dejado nuestra vida en quien sabe que clase de relaciones, experiencias o medios.
La propuesta de los maestros va justamente en dirección contraria, se trata de percibir la vida como un fluir, como una corriente armónica cuyo discurrir es capaz de llevarnos a cualquier lugar y aportarnos todo lo que necesitamos. Los Taoistas lo llamaron NO HACER, término cuyo significado se refiere a una acción no reactiva y enormemente operativa y muy poderosa a pesar de su aparente sutilidad, ya que uno es soberano de sus acciones y cuenta a su favor con el fluir de la vida.

SE CONSCIENTE DEL TIPO DE RELACIONES QUE TIENES

Las mejores personas alimentan lo bueno en los demás, no lo malo.
Las peores personas alimentan lo malo en los demás, no lo bueno.

Confucio.